'Voy a batallar para que mi hijo regrese a mi lado'

"A partir de hoy estaré batallando para que mi hijo regrese a mi lado y por que tenga una mejor vida", dijo Armando Torres Pozo, padre de Lesiat Torres Carrión, un niño de cuatro años con parálisis cerebral, tras recibir el dinero recaudado por DIARIO DE CUBA en una campaña en internet.

DDC dio a conocer el caso de Lesiat en enero pasado. El niño, que sufre también trastornos auditivos y otros problemas derivados de un parto complicado, vivía entonces en precarias condiciones con su padre, de 63 años, en una vivienda destruida por el huracán Sandy en Veguita de Galo, Santiago de Cuba.

Debido al interés mostrado por los lectores, esta publicación inició una campaña de 24 horas en internet destinada a recaudar dinero para ayudar a la familia.

La iniciativa recaudó 703 euros donados por 32 personas. Debido a que la web de la campaña se quedaba con el 10% de lo gestionado, Armando Torres Pozo y su hijo obtuvieron 627,24 euros. Este 21 de marzo, DIARIO DE CUBA entregó al padre 638,93 CUC, según la tasa de cambio vigente en la Isla.

"Estoy muy agradecido con todas aquellas personas que voluntariamente donaron todo ese dinero para que mi Lesiat mejore su calidad de vida y vuelva a estar a mi lado", dijo Torres Pozo.

Tras la publicación del caso y la campaña para ayudar a la familia, las autoridades de Santiago de Cuba tomaron represalias y separaron a padre e hijo. Incluso presionaron a Torres Pozo para que se negara a recibir el dinero recaudado.

"La fiscal de Menores vino a verme luego de que se publicó mi caso y me lo ingresó [al niño] en el Hogar de Impedidos Físicos, según ella porque iban a reparar la casa y el polvo le haría daño. Eso no lo entiendo porque cómo es posible que desde que nació mi niño hasta la fecha, que tiene ya cuatro años, ahora es que se interesan por el estado de la casa", criticó el padre.

El Gobierno no ha cumplido su palabra y la vivienda sigue en las mismas condiciones.

"No me han arreglado la casa, pero están arreglando parques y otros centros estatales", criticó Torres Pozo.

Lesiat sufrió problemas respiratorios tras ser internado en el Hogar de Impedidos Físicos y tuvo que ser trasladado al Hospital Pediátrico Sur, conocido como La Colonia, donde aún permanece.

"Yo les pedí que me dieran el niño para llevármelo a mi casa. Que ya no quería que me hicieran ningún arreglo a mi vivienda porque para mí es más importante la vida de mi hijo y allí se iba a morir ya que su salud iba de mal en peor. Los médicos no aceptaron y me lo ingresaron en La Colonia", comentó Torres Pozo, quien cría en solitario al niño.

"Al principio, en el Hogar de Impedidos me dejaban estar todos los días con el niño, pero cuando vieron que yo me estaba dando cuenta del maltrato a los pacientes, me redujeron las visitas a dos veces por semana, de 11:00 de la mañana hasta las 12:00 del día. Ya en La Colonia sí me dejan estar a tiempo completo con él porque saben que yo lo cuido bien", señaló.

Según Torres Pozo, la salud del niño ha ido mejorando gracias a la dedicación de una trabajadora de la instalación hospitalaria.

"Lesiat en estos momentos se está recuperando bastante y tengo que agradecerle a una vecina que trabaja en La Colonia (?) Yo digo que está bien porque lo tengo vivo, pero totalmente bien no está por su patología", afirmó. "Le están poniendo antibióticos porque tiene lesiones en los pulmones, según dicen los médicos".

También "le están dando un suplemento dietético que considero completo, de acuerdo con los recursos del hospital", añadió el padre. "La higiene se mantiene de forma irregular. A veces está todo limpio y otras no".

"Me siento muy mal porque quiero tener a mi hijo a mi lado como estábamos antes y que mañana, cuando el Señor me mande a buscar, pueda dejar a mi niño acomodado, con buena salud y bien educado", dijo el padre. "Tener a Lesiat fuera de casa ha sido perjudicial para ambos porque su salud decayó y yo sufro por eso".

"Pienso emplear el dinero recaudado en arreglar la casa para que me dejen llevar al niño y cuidar de él como siempre, porque cuando nació, el médico pronosticó tres meses de vida, y yo lo he mantenido vivo por cuatro años", indicó.

Torres Pozo ha intentado trabajar como cuentapropista, vendiendo frituras y limpiando zapatos, pero los impuestos demasiado altos, las escasas ganancias y la atención a tiempo completo que necesita su pequeño lo han obligado a quedarse en casa. La familia recibe una exigua pensión estatal de la cual la mitad se va en medicinas.

El padre hizo un reclamo a las autoridades de la provincia: "Yo necesito un teléfono fijo para llamar a una ambulancia en caso de urgencia. Hasta la fecha me están dando largas porque dicen que tienen que analizar el caso, pero este problema no es de análisis", consideró.

"Agradezco infinitamente a las personas que hicieron la donación y a DIARIO DE CUBA por llevar a cabo esta campaña para hacerme llegar esta ayuda. También le doy gracias a Dios por tocar los corazones de estas personas", concluyó Torres Pozo.

>El padre de Lesiat Torres Carrión agradece la ayuda de los donantes DDC | 23 de Marzo de 2017 - 11:42 CET. | 0
Publicado en:http://www.diariodecuba.com/cuba/1490264869_29857.html