El inicio de la hecatombe

NUEVA YORK, Estados Unidos.- No hay que ir muy lejos para apuntar el origen de la crisis que hoy agobia al pueblo de Venezuela: Hugo Chávez Frías.

La primera presidencia de Chávez se inició luego de las elecciones de 1998, en la que resultó ganador. Asumió el poder el 2 de febrero de 1999.

El 17 de enero de ese año había visitado nuevamente Cuba. Antes lo había hecho en varias ocasiones como un ambicioso militar. A los pies de Fidel Castro recibió la formación que le faltaba.

Mucho se ha dicho sobre la perfecta simbiosis de estos dos funestos personajes de la historia latinoamericana. Como dice el refrán, “Dios los cría y el Diablo los junta”.  Dudo que Dios los haya criado, pero los encuentros, en la década de los 80, marcaron para siempre los destinos de Venezuela.

Chávez se transformó en el hijo predilecto del dictador cubano, en el delfín, que iba a materializar todos los sueños  de apoderarse de la región y de antagonizar y enfrentar al odiado país del Norte, Estados Unidos.

En Venezuela, el mandato de Chávez se caracterizó por el ensañamiento hacia los que no comulgaban con su doctrina. Y especialmente en la nacionalización y despojo de bienes bajo la orden de “exprópiese”, y en el hostigamiento y cierre de los medios de comunicación.

Con los dos mandatos de Chávez se consolidó el inicio del caos económico y social de la nación bolivariana.

Hay chavistas que se preguntan qué habría pasado si no hubiera ocurrido la enfermedad y muerte del mandatario. La respuesta es que no habría sido mucho más diferente que ahora, aunque lo único que salvaba a Hugo Chávez era su carisma con el pueblo.

Su sucesor, Nicolás Maduro, no tiene la personalidad y no posee las condiciones mínimas para un cargo de tanta responsabilidad como lo es la presidencia de la nación. Además, prosiguen las dudas de que tenga realmente la nacionalidad venezolana

La llegada al poder de Maduro está también cuestionada por la posible manipulación de las máquinas de votación por un grupo de cubanos, encabezados por el comandante Ramiro Valdés ?experto en tecnología, informática y represión en la Isla?, quien, bajo el pretexto de resolver problemas energéticos de Venezuela, estuvo en varias ocasiones en Caracas.

Valdés se ha sumado a un contingente de funcionarios cubanos que trabaja desde hace años asimilado en distintas áreas de la administración pública, desde la salud ?a través de los conocidos médicos del programa de atención popular “Misión Barrio Adentro”?, hasta servicios de identificación e inmigración.

Valdés es fundador del G2 (servicios de inteligencia) de Cuba, fue ministro del Interior, tiene enorme experiencia en seguridad e informática y ha llegado a declarar en un Congreso del partido que “Internet es un invento de Occidente para el exterminio de la humanidad”.

Las visitas de Valdés comenzaron en febrero de 2010 y prosiguen hasta estos días.

La presencia de este comandante es constante, según aseguran fuentes de confianza desde Caracas. Ramiro Valdés llega por los aeropuertos militares para pasar desapercibido y dirige desde tierra venezolana las  operaciones de represión con el fin de contener, a viva fuerza, las manifestaciones en contra del gobierno de Nicolás Maduro.


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