El personal de la embajada española en Venezuela lleva tres semanas en máxima alerta. Después de la autoproclamación de Juan Guaidó, Nicolás Maduro advirtió que echaría a todos los diplomáticos cuyos países legitimaran al líder opositor. Ahora que el Gobierno español ha reconocido al presidente de la Asamblea Nacional, la delegación admite que “podemos tener problemas”.
Ese es el mensaje, de hecho, que se ha trasladado desde la propia embajada al ministerio de Asuntos Exteriores. Según confirman al Confidencial Digital fuentes diplomáticas, “hay una escalada de tensión en Venezuela y España, su Gobierno y su embajada, han sido puestos en la diana por Nicolás Maduro”.
A la espera de una “respuesta” de Maduro
En la delegación española en Caracas son conscientes de que, tras las decisiones adoptadas por Pedro Sánchez esta semana, “va a haber una respuesta contundente de Maduro”.
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El líder bolivariano, recuerdan, no ha pasado por alto el reconocimiento, por parte del Ejecutivo español, de Juan Guaidó como presidente encargado de convocar elecciones en Venezuela. No obstante, “lo peor está por llegar”, ya que se esperan “acciones contundentes” en el momento en el que el Gobierno acepte un nuevo embajador venezolano en España.
Tal y como adelantó ECD, Guaidó nombrará, en los próximos días, a un nuevo embajador de Venezuela para España. El favorito es Antonio Ecarri, aunque tampoco se descarta el nombre de Fernando Gerbasi.
En todo caso, cuando Guaidó tenga un elegido, “solicitará a España el plácet para nombrarle embajador”. Un trámite que volverá a poner en un brete al Gobierno: “De aceptarlo, deja automáticamente sin funciones al actual embajador, lo que provocaría las iras de Nicolás Maduro aquí”.
El día 12, “clave”
Según las previsiones del equipo de Jesús Silva, embajador español en Caracas, ese reconocimiento por parte de España podría producirse el próximo martes, día 12, en el que, además, están previstas varias movilizaciones, tanto a favor como en contra de Maduro.
Esa suma de circunstancias podría provocar una “tormenta perfecta” que afectara especialmente a la embajada española en Venezuela: “Si no nos ha echado antes, ese día Maduro puede ordenar nuestra inmediata expulsión”.
Una amenaza que podría ser el menor de los problemas: “Se está alimentando el odio contra los países que han reconocido a Guaidó y los que quieren dar ayuda humanitaria. Y nosotros estamos aquí en medio aguantando el temporal”, avisan las fuentes consultadas.
